TENGO MUCHAS COSAS QUE CONTARTE

¡Qué bueno que llegaste!

Te estaba esperando desde hace ya varias horas, he puesto la alarma más tiempo, para poder encontrarme contigo; creo que hoy perderé el autobús al trabajo, caminaré, no te preocupes, lo importante es que estas aquí para escucharme y te cuente todo lo que me ha pasado, está tarde he peleado con él, me ha dicho que cuando llego a casa lo único que hago es pensarte y no prestarle atención, cree que lo engaño, porque si no estoy en el trabajo, o con mis amigas, vengo a encontrarme contigo y si, tiene mucha razón; me gusta venir a encontrarme contigo, tu realmente haces que mis días se alegren cuando te veo, me causas mucha paz, pienso que el debería ser un poco más comprensivo conmigo y tenerme paciencia.

Se que algún día tu encontrarás tu camino y yo seguiré con el mio, pero mientras eso suceda quiero verte todo el tiempo que sea necesario, me has dicho ya varias veces que no nos encontremos así, que solo basta con el pensamiento, pero para mi una necesidad verte, yo sé que tengo muchas cosas que hacer, con mi familia,la universidad, trabajo y demás, pero es que ya no se cómo escaparme para verte. Tu sabes bien como es esto, llevamos ya varios meses haciéndolo, al principio me dijiste que te daba gusto verme, pero ahora siento que te alejas y no puedo detenerte...

¿Qué? ¡Espera! ¿ya te tienes que irte? Todavía tengo muchas cosas que contarte, esto solo era el comienzo.

¡Noo!, La alarma ha sonado otra vez, ¡espera!, quédate un momento más, tengo muchas cosas que contarte, ¡aun no quiero despertar!